jueves, 7 de enero de 2010

El patio trasero del Ayuntamiento en Montjuïc

La zona de Miramar en Montjuïc debe ser un punto non grato para el Alcalde de Barcelona y, por varios motivos del que sólo él es responsable, se ha convertido en un lugar poco apetecible para los ciudadanos. Un parque cerrado por falta de previsión y un hotel privado y en quiebra sobre dominio público.

En la falda sureste de Montjuïc se sitúan los jardines de Costa i Llobera, ubicados allí desde hace 40 años. Tienen un gran prestigio en todo el mundo y son el paraíso de los aficionados a los cactus en sus más de 6 hectáreas de superficie. Es un espacio de gran riqueza botánica y de unas características únicas. Pero esa zona con vistas al puerto y la Ronda Litoral no parece precisamente para el Ayuntamiento un espacio prioritario del que ocuparse. Después de un largo periodo de progresiva degradación, a principios de 2006 el Instituto Municipal de Parques y Jardines comenzó su rehabilitación. Los trabajos, presupuestados en 2.500.000 euros, consistían en una reforma integral, con la plantación de vegetación y la adecuación de las infraestructuras y la accesibilidad.

El proyecto se abordó con la habitual falta de previsión municipal y se descubrieron graves problemas geológicos y de drenaje derivados de la antigua cantera sobre la que se asienta el parque; el gasto (por ahora) se ha elevado en otro millón de euros y un importante parque sigue cerrado desde hace muchos años. Todo ello mientras cada día proclaman desde el Ayuntamiento y a los cuatro vientos que son sobre todo un gobierno verde, sostenible y ecologista. De lo que nadie duda es que tendremos arreglado el parque de Mossén Costa i Llobera para inaugurarlo justo antes de las elecciones municipales de 2011.

Junto al parque se encuentra el Hotel Miramar, anteriormente sede de los estudios de TVE. El Ayuntamiento de Barcelona ha vendido su paquete de acciones del 10% del hotel por un precio simbólico de un euro a la empresa Fincaflorida, propietaria del 90% restante a través de la empresa pública Barcelona de Serveis Municipals S.A. (BSM). Los munícipes tuvieron miedo, verdadero pánico, a que el negocio ruinoso que ellos promovieron les acabara por estallar ante el riesgo de quiebra de la sociedad, con una deuda de más de 70 millones de euros. Es un hotel de lujo a un paso del embargo, instalado en un edificio de propiedad municipal en régimen de concesión por 50 años. La complicidad del Ayuntamiento en este proyecto errático, lleno de irregularidades urbanísticas, denunciadas por parte de entidades vecinales por su altura y la usurpación de un pedazo de los jardines Forestier y de un antiguo camino, y luego la privatización del edificio sobre suelo de dominio público, evidencian la dilapidación del erario que practica Jordi Hereu. El coste para los barceloneses desde 2007 cuando fue inaugurado hasta ahora ha sido de más de 1,3 millones de euros por año entre pérdidas y créditos. Balance de nuestro Alcalde metido a hostelero: un negocio que ha requerido de grandes inversiones y que ha resultado ruinoso para los ciudadanos. Unos 10 millones de euros tirados a la basura.

La zona, además, sufre el acecho de la delincuencia que se ceba en los turistas, básicamente porque son los únicos que visitan el entorno y el transporte público casi no existe: el más cercano se encuentra en la Plaza Carlos Ibáñez, a unos 400 metros, con la línea 50 y el Bus Turístico. Los accesos que van desde el puerto a Miramar o del Paseo de Montjuïc a Miramar están en un penoso estado de abandono. Sumemos el derroche de los casi 7 millones de euros invertidos en la construcción del túnel de la carretera de Miramar, obra que ha provocado que el acceso al jardín y al resto del conjunto se haya convertido en más difícil.

En resumen, nos encontramos con que esta zona de Miramar, antaño tan conocida y querida por los barceloneses, ha quedado relegada a algo apartado -además de onerosa para los contribuyentes- y convertida en el patio trasero de Barcelona.

Nico Ortiz

1 comentario:

  1. A Hereu, si no sirve para poner areas verdes de aparcamientos y seguir recaudando, no le interesa.
    Hereu, el alcalde que peor castigo aflije a los ciudadanos residentes de barcelona !!

    ResponderEliminar