17-12-2010
El ayuntamiento de Barcelona ha aprobado hoy, en su último pleno del año, un presupuesto de 2.757 millones para el 2011 y la constitución de la comisión de investigación de las irregularidades en el distrito de Ciutat Vella, que presidirá el tercer teniente de alcalde, Jordi William Carnes. El presupuesto consolidado y las ordenanzas fiscales para el año 2011 se ha aprobado con los votos a favor de los dos partidos de gobierno, PSC e ICV-EUiA, más los de ERC y los votos en contra de CiU y PP, como los tres presupuestos anteriores.
El presupuesto consolidado del ayuntamiento y las empresas y organismos autónomos para 2011 se eleva a 2.757 millones de euros, en los que están incluidos los 240 millones de deuda adelantados a este año, para paliar los efectos de la prohibición de endeudarse a los ayuntamientos que adoptó el Gobierno central.
El apoyo de todos los grupos a una proposición presentada por el PPC ha permitido constituir la comisión no permanente del Consejo Municipal para investigar, analizar y aclarar la actuación de los servicios y órganos municipales en la tramitación administrativa de los expedientes de otorgamiento de licencias de obras, de licencias de actividades y de apartamentos turísticos, así como de inspección y control de la legalidad urbanística en Ciutat Vella.
Como la comisión de investigación del Hotel del Palau, esta comisión estará residida por el teniente de alcalde Jordi W. Carnes, pero a diferencia de aquella, esta deberá aprobar sólo por mayoría un dictamen al final de sus trabajos.
Además, en el pleno, el Gobierno municipal ha presentado una medida de gobierno del Plan Estratégico Metropolitano así como los informes de contratación social y ambiental, la salud en Barcelona en el año 2009 y las inversiones municipales realizadas en cultura entre el 2007 y el 2011, que ya se han dado a conocer en las últimas semanas.
El pleno ha ratificado, con el voto en contra del PPC y el apoyo de los otros cuatro grupos municipales, la "Carta de Ciudadanía.
Carta de Derechos y Deberes de Barcelona", que se ha elaborado a partir del trabajo de una comisión jurídica, una de expertos y una de políticos con un representante de cada grupo.
En sus intervenciones, los portavoces de PSC, CiU, ERC y ICV-EUiA y el alcalde Jordi Hereu han señalado las renuncias que han hecho durante los dos años de elaboración de la carta para conseguir un documento de consenso y han lamentado que finalmente el PPC no la haya apoyado.
El presidente del grupo popular Alberto Fernández ha señalado como motivo del voto en contra que no se hayan aceptado algunas de sus propuestas en temas de inmigración, de educación y de uso de la lengua española.
El largo pleno, de 6 horas, durante el que los concejales se han manifestado incómodos por el frío, ha tenido también su momento emotivo, cuando el concejal popular Jordi Cornet ha tomado la palabra para despedirse tras 16 años formando parte del consistorio barcelonés.
Cornet, que ayer fue nombrado primer secretario de la Mesa del Parlament, ha recordado que entró en el Ayuntamiento con los cabellos negros y ahora los tiene totalmente blancos "por su culpa".
Dos declaraciones institucionales aprobadas por unanimidad han cerrado el último pleno del año.
La primera, que ha leído el ecosocialista Ricard Gomà, ha condenado los incidentes en el Sahara Occidental y la censura informativa del Reino de Marruecos.
La segunda, que ha leído el popular Alberto Fernández, ha manifestado el reconocimiento y recuerdo del Consejo Municipal al agente de la Guardia Urbana Juan Manuel Gervilla en el décimo aniversario de su asesinato, cometido por ETA.
EFE
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